La forestación del abedul empieza con semillas limpias
El abedul es una estrella del reino arbóreo. Productor prolífico de semillas de gran dispersión, es un árbol pionero ejemplar. No es de extrañar que las campañas de forestación en territorios donde el abedul es autóctono recurran a esta especie para hacer despegar sus proyectos forestales.
Pero antes de que los árboles puedan regenerarse, sus semillas deben convertirse en plántulas sanas. La estrategia de la naturaleza consiste en esparcir tantas semillas como sea posible, con la esperanza de que germinen y crezcan las suficientes.
Con la ayuda de la ciencia y la tecnología, los organismos de gestión forestal adoptan un método más eficaz que reduce el margen de error. Sin embargo, encontrar semillas viables en un lote nuevo es más fácil decirlo que hacerlo.
Hay un aparato para eso
Las cosechas contienen biomasa no deseada, y los procesadores deben tamizar las malas hierbas, las pajas y los residuos para llegar a las semillas de abedul. Y aun así, no todas las semillas tienen el mismo potencial. Algunas semillas están rotas o vacías, mientras que otras tienen un pericarpio más grueso y necesitan un tratamiento especial.
Ante esta difícil tarea, la Comisión Forestal Holandesa (Staatsbosbeheer) solicitó la ayuda de Seed Processing Holland. Esta empresa especializada cuenta con décadas de experiencia en la limpieza de semillas y la preparación de lotes de alta calidad.
Los sistemas de limpieza aplican diversas técnicas para separar lo bueno de lo malo. Las unidades de gravedad, los tamices vibratorios y los clasificadores magnéticos son solo algunas de ellas, pero para este proyecto de forestación, los expertos de Seed Processing Holland recomendaron una solución de limpieza por tamiz de aire.
Detección de todos los contaminantes con sólo pulsar un botón
La cosecha fluye a través de cribas de precisión, filtrando el material no deseado y recogiendo las semillas viables. Este sistema separa en función del tamaño y la forma, pero las semillas vacías y los diminutos detritus siguen cayendo por las ranuras.
Un chorro de aire está preparado para ellos en la parte inferior de la unidad, soplando todo excepto las semillas viables. El sistema automatizado está preconfigurado para las semillas de abedul, por lo que los operarios de la comisión pueden garantizar una clasificación precisa.
Hay un bosque en cada semilla. Pero si no se separan cuidadosamente de los contaminantes, no crecerán más allá de un montón de residuos biológicos. Gracias al Seed Processing Holland, el abedul holandés tiene un camino acelerado para recuperar su territorio perdido.
Casos de clientes
En nuestros más de 55 años de existencia, hemos tenido la oportunidad de realizar numerosos proyectos para nuestros clientes de todo el mundo. Desde máquinas autónomas hasta nuevas líneas de procesamiento de semillas. Para que estos proyectos sean un éxito, hemos colaborado estrechamente para hacer realidad la solución deseada que se adapta perfectamente al espacio disponible.